Institución del Día de los Hermanos
Para: Renata Kaczmarska, coordinadora del Programa de Familia de Naciones Unidas
"Si quieres ver a un niño feliz, dale un hermano
Si quieres ver a un niño muy feliz, dale muchos hermanos"
Una vida se va construyendo en torno a los afectos, acontecimientos, aprendizajes, compromisos, ideas, y muchas otras cosas. El calendario señala fechas, efemérides, memorias. Por eso se destacan días especiales, para celebrar lo que es más importante.
Los hermanos son lo más cercano a nosotros. Crecimos con ellos, en una familia, una red de complicidades y vivencias comunes. Lo que vivimos entre hermanos es único, irrepetible, da forma a nuestra vida para siempre.
Por eso es tan importante asignar un día dedicado a los hermanos, a la relación entre hermanos.
Esto es lo que proponemos. La creación de un Día de los Hermanos. Ya sea en familia, ya socialmente, esta es la manera de mantenernos siempre presentes, de fortalecernos y celebrar lo que de importante acontece entre los hermanos:
Crecer juntos
Las aventuras
Los descubrimientos
La solidaridad
La cercanía
La complicidad
La identidad que es la diferencia
La diversidad
La ayuda, la cooperación y el reparto de tareas
La alegría y la tristeza
Las emociones, buenas y malas
La tolerancia
La reconciliación
El compartir
La historia, las raíces, la memoria
Quien tiene la felicidad de tener hermanos, conoce bien el significado de pertenencia.
El recientemente fallecido fundador y presidente de la Asociación Portuguesa de Familias Numerosas (APFN), y también fundador y presidente de la Confederación Europea de Familias Numerosas (ELFAC), Fernando de Castro, es autor de una frase que marca el espíritu de esta iniciativa y celebración: "Si quieres ver a un niño feliz, dale un hermano; si quieres ver a un niño
muy feliz, dale muchos hermanos".
¿Por qué?
Un día de los hermanos es una fiesta por excelencia, es una calurosa celebración en el sentido estricto de la palabra, fraternidad. En el mes de mayo destacan algunas celebraciones familiares como el Día de la Madre (el primer domingo de mayo) y el Día Internacional de la Familia, declarado e instituido el 15 de mayo tras una deliberación de la Asamblea General de Naciones Unidas, en 1992. Acabar el mes, el 31 de mayo, con una fiesta del Día de los Hermanos, es cerrarlo con broche de oro, ensalzando una de las más fuertes relaciones generacionales y de sustento de la familia.
Por otro lado, al día siguiente, el 1 de junio, se celebra el Día Mundial de las Madres y los Padres, declarado en 2012 por Naciones Unidas para reconocer su labor y honrar su trabajo en todo el mundo. De este modo, se celebran dos días consecutivos muy inspiradores a la luz de la frase emblema del Día de los Hermanos:
"Si quieres ver a un niño feliz, dale un hermano.
Si quieres ver a un niño muy feliz, dale muchos hermanos".
Es como si, todos unidos, en la víspera del Día del Niño, les mostrásemos la felicidad de tener hermanos.
Además del valor social de la celebración de la fraternidad y la solidaridad de la familia, la institución de esta fecha añadiría valor social a un tiempo en el que, tanto en Portugal como en Europa, la sociedad y los ciudadanos son cada vez más conscientes de la crisis y el problema de la natalidad.
Por lo tanto, los suscriptores de esta apelación piden actuar de la siguiente manera:
"QUEDA INSTITUIDA A NIVEL INTERNACIONAL LA CELEBRACIÓN DEL DÍA DE LOS HERMANOS, QUE SE CONMEMORARÁ ANUALMENTE EL 31 DE MAYO"
Madrid, a 29 de mayo de 2014
CONFEDERACIÓN EUROPEA DE FAMILIAS NUMEROSAS
FEDERACIÓN ESPAÑOLA DE FAMILIAS NUMEROSAS
