Recogida de Firmas Pacto por la educación
Para: Congreso de los Diputados
Desde hace algo más de tres décadas se han promulgado una serie leyes educativas que no parecen haber conseguido los objetivos que se habían propuesto, a juzgar por las altas tasas de fracaso escolar que soporta hoy en día el sistema.
La sucesión de siglas (LOECE, LODE, LOGSE, LOPEG, LOCFP, LOCE y LOE) junto a la diversidad de aplicaciones autonómicas han provocado el estupor entre los profesionales de la enseñanza, muchos de los cuales arrastran una sensación crónica de desánimo y frustración.
La aplicación de esta variedad de normativas también ha propiciado la desorientación entre los padres, que viven en primera persona, y con impotencia, el fracaso de sus hijos. Pero, sobre todo, ha repercutido muy directamente sobre los alumnos, muchos de los cuales sufren este fracaso en primera persona, acarreando a diario pesadas mochilas con textos voluminosos y cambiantes, cuyo contenido parece inabarcable cada curso.
Aun reconociendo que las causas de la crisis educativa crónica que nos ha tocado vivir son complejas, cabe considerar en gran medida como responsables a nuestros dirigentes políticos. Ellos han utilizado el sistema educativo como arma arrojadiza, contaminándolo de ideología, sometiéndolo a cíclicos vaivenes y atomizándolo en currículos autonómicos que han multiplicado el desconcierto general.
Entendemos que, en este momento y ante el cambio de gobierno, la sociedad civil debe movilizarse y pedir:
1º) Un pacto estable por la educación entre todas las fuerzas políticas, basado en un análisis alejado de las ideologías y centrado únicamente en aspectos educativos.
2º) Un currículo diseñado de acuerdo a las necesidades de los alumnos y libre de intereses comerciales y políticos.