Opositores Docentes Descontentos 2015
Para: Ministerio de Educación
Somos un colectivo de Maestros/as de la Comunidad de Andalucía, compuesto por 770 docentes de todos los niveles educativos y todas las especialidades.
Ante los resultados tan nefastos de la primera prueba del proceso, este colectivo tiene como objetivo que el sistema de Oposición al que estamos sometidos cada dos años, sea un proceso de selección más justo, donde se evalúe objetivamente nuestros conocimientos y no la capacidad de memorizar. Solicitamos el cambio por el bien de todos los miembros, y llamamos miembros no sólo a los docentes, sino también a esos niños/as a los que impartimos docencia, a todos los padres y madres que confían a sus hijos/as a los docentes, así como a aquellos que trabajan para quien ordena este sistema. Este cambio que proponemos sería un beneficio para todos.
Este manifiesto surge tras conocer unas calificaciones, las cuáles no se corresponden con el trabajo realizado por parte de tantos opositores que han dado lo mejor de sí, renunciando a todo aquello que le haya impedido estudiar, en busca de su futuro laboral. Una vez conocida la injusta calificación, nos encontramos ante la negativa de nuestro derecho a revisión de examen; a recibir una explicación para entender, que aun habiendo cumplido todos y cada uno de los criterios que la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía ha hecho pública para este proceso de Oposición, nuestro examen está suspenso; a comprobar cómo el mismo tema, de la misma academia, realizado por personas que lo han estudiado a la perfección, son calificados con sobresaliente y suspenso; entre otras tantas injusticias que los opositores nos vemos obligados a sufrir para conseguir un trabajo vocacional.
Todo esto recoge los siguientes derechos:
• Revisión y explicación sobre aquello en lo que hemos fallado en nuestro examen.
• Reclamación de nuestro examen con una corrección más objetiva y posibilidad de cambio de nota, si así lo requiere la corrección.
• La oportunidad de reclamación para todos los procesos selectivos futuros.
• Asignar tribunales suficientemente capacitados para corregir objetivamente la prueba.
• Un modelo de examen que contemple la objetividad (tipo test) con la consiguiente publicación de un temario común para cada comunidad, para así elaborar los criterios de corrección sobre esos temas.
• Reunión previa de los tribunales para acordar las pautas que se marcarán en cuanto a formato y forma del ejercicio así como las cuestiones que se considerán de valoración negativa en este aspecto.
Ante tal injusta situación sufrida en este proceso que se realiza cada dos años, hemos podido recopilar varios testimonios en este año de Oposición 2015, entre los cuáles destacamos:
1. Una chica cuya calificación en la primera parte del proceso es un 1. Esta chica, al no estar de acuerdo en absoluto con su nota porque se había volcado totalmente en esta oposición, decidió acudir a su tribunal para solicitar ver su examen. Al estar acompañada de su abogado, su tribunal accedió a su demanda, aun estando prohibido según la gran mayoría de los tribunales, justificándose con las órdenes que decían recibir para no enseñar exámenes. Cuando vio su examen, pudo comprobar que el caso práctico tenia tachones realizados por parte del tribunal y el tema ni siquiera se lo habían leído. La respuesta del tribunal al ver tal situación fue que no les gustaba su tema, a pesar de que estaba bien estructurado y tenía buen contenido. Cuando esta chica pide una explicación coherente, pues una oposición no puede ser corregida por cuestión de gusto, el tribunal se sinceró y le comunicó que tenían que suspender a gente aun sin merecerlo, ya que sólo había una plaza ofertada.
2. Otra opositora, que tras dedicar el año completo al estudio de las Oposiciones, realiza el escrito del tema a la perfección, con cada uno de los apartados, normativa, autores y bibliografía correspondiente al tema, así como la realización de un caso práctico, con la estructura adecuada y un contenido que responde a cada una de las cuestiones planteadas en dicho caso práctico, recibe una calificación de 3,4 y por supuesto, no recibe explicación alguna para la obtención de esa nota.
En definitiva, los docentes hemos sufrido este año la negación a poder revisar nuestra prueba ante la sorpresa de ver una calificación que no se corresponden en absoluto al examen realizado. Los tribunales se limitan a transmitirnos que se trata de una orden de Delegación, que no tenemos derecho a reclamar nada según la Orden 23 de Marzo de 2015, mientras que dicha Orden expone todo lo contrario, que una vez finalizado el proceso selectivo podemos hacer la reclamación pertinente.
Después de años tras años de debates y ante la perspectiva de pocos cambios significativos en este proceso selectivo, damos a conocer el manifiesto que hemos elaborado e invitar a todo personal docente a incorporarse a este colectivo donde podrá exponer con entera libertad sus ideas respecto al sistema de oposición docente tan injusto al que estamos sometidos cada dos años.
¡SÍ A UNAS OPOSICIONES JUSTAS!